Los investigadores que analizaron los datos genéticos de los pacientes con cáncer de vejiga descubrieron tres variantes genéticas comunes heredadas, también conocidas como polimorfismos, que se asocian significativamente con el desarrollo de esta neoplasia.
Los tres polimorfismos en los genes que producen daño en el ADN inducido por la reparación de los productos químicos en el humo del tabaco, y dos de ellos también están asociados con los daños provocados por los radicales libres, informaron los investigadores del Cancer Research (2009, 69:6857-6864).
Los resultados ayudan a reforzar que el hábito de fumar juega un papel significativo en la patogénesis del cáncer de vejiga.
«Un punto importante a considerar es que todas las personas que fuman deben dejar de hacerlo, independientemente de su genotipo», observó el investigador principal, Mariana Stern, PhD, Profesor Asistente de Medicina Preventiva de la Facultad de Medicina Keck de la Universidad de Southern California, Los Ángeles. -Eso es porque el tabaquismo es un factor de riesgo de cáncer de la vejiga para todas las personas, no sólo los que tienen los polimorfismos «.
El Dr. Stern y sus 47 co-investigadores del Consorcio Internacional de Cáncer de la vejiga analizaron los resultados de 13 estudios sobre polimorfismos genéticos asociados con el cáncer de vejiga. El equipo se centró principalmente en 11 estudios en los que los blancos no latinos son el grupo racial o étnico predominante.
Ellos encontraron que tres polimorfismos de ADN en tres genes de reparación se asociaron significativamente con el cáncer de vejiga entre los blancos no latinos. Las probabilidades de desarrollar cáncer de vejiga aumentaron un 9 a un 10% entre los portadores de cada uno de estos polimorfismos.
Uno de los polimorfismos se asocian únicamente con un mayor riesgo de cáncer entre las personas que eran fumadores actuales o pasados. Los otros dos polimorfismos se asociaron un mayor riesgo de cáncer nde vejiga, incluso entre aquellos que nunca habían fumado.
«Por lo tanto, nuestros resultados ofrecen la motivación adicional para identificar a las otras fuentes de exposición a carcinógenos, tales como el uso de tinte de pelo, entre otros riesgos», dijo el Dr. Stern.
