En el adulto, si bien la hidrocele no supone un riesgo para la salud de los pacientes, el volumen que llega a alcanzar puede ser importante y muy molesto.
¿Por qué se produce la hidrocele en el adulto?
La hidrocele se produce como consecuencia de injuria o inflamación escrotal, pudiendo ser la consecuencia de infecciones agudas o crónicas testiculares y epididimarias, cirugías e incluso traumatismos directos. Una causa poco común, es la presencia de cáncer testicular.
El resultado de esta injuria es el aumento de volumen escrotal a expensas de la acumulación de líquido entre las túnicas vaginales parietal y visceral. El volumen alcanzado puede ser muy importante, siendo antiestético, y en algunos casos severos, impidiendo la deambulación.
¿Cómo se trata la hidrocele?
Lo ideal es identificar la causa de fondo y tratarla, sin embargo la mayoría de las veces el líquido acumulado no se reabsorve, por lo que es necesario el tratamiento quirúrgico.En la actualidad el tratamiento estándar es la hidrocelectomía, la cual consiste en la extracción quirúrgica del líquido acumulado y la eversión de la túnica vaginal. Este procedimiento es sencillo y ambulatorio. Sin embargo es necesaria la anestesia peridural y un período de recuperación mínimo de dos semanas, no excento de dolor de variable intensidad.
¿En qué consiste la escleroterapia del hidrocele?
La escleroterapia es un método utilizado desde 1930 con el objetivo de tratar enfermedades colapsando tejidos, su uso más difundido en la actualidad, es en el tratamiento de las várices.
La escleroterapia para el tratamiento de la hidrocele no es un procedimiento nuevo. Existe abundante bibliografía que comprueba su seguridad y eficacia como alternativa terapéutica.
¿Cómo se realiza la escleroterapia de la hidrocele?
El procedimiento se realiza de manera ambulatoria.
Para este efecto, luego de la asepsia y antisepsia correspondiente, se punza la cavidad drenándose el contenido, e inmediatamente se coloca la sustancia esclerosante.
Nosotros hemos desarrollado un protocolo que tan sólo unos minutos, y no produce dolor.
- Es un procedimiento no doloroso
- No es necesaria la anestesia regional
- No requiere hospitalización
- Es más económico que la cirugía convencional
- Permite el rápido retorno a la actividad
- Útil en pacientes de alto riesgo y en uso de medicación anticoagulante.
- Gran satisfacción de los pacientes


