Cuando se lanzó inicialmente el cigarrillo electrónico como una manera de evitar el dañino humo producido por los cigarrillos convencionales, se pensó que con ello se eliminaba finalmente la posibilidad de inhalar sustancias tóxicas y cancerígenas, sin embargo como veremos a continuación, esto no es del todo cierto.
Esta sustancia, que también se emite en los cigarrillos convencionales, tiene una concentración 15 veces mas alta en los cigarrillos electrónicos, por lo que los investigadores desaconsejan su uso.
Para que se hagan una idea de lo dañino de la sustancia, la cantidad contenida de formaldehído en un solo cigarrillo electrónico equivale a que una persona se fume 5 cajetillas de cigarrillos en un día.
El estudio ha sido ciente,ente publicado en el New England Journal of Medicine.






