El dolor pélvico crónico y las disfunciones del suelo pélvico son condiciones complejas que pueden abordarse con diversas técnicas de fisioterapia. Estas técnicas están diseñadas para mejorar la función muscular, las tensiones miofasciales, reducir el dolor y restaurar la calidad de vida. A continuación, te detallo algunas de las técnicas más utilizadas:

1. Técnicas de Liberación Miofascial

• Masaje terapéutico: Se aplica para liberar tensiones en los músculos del suelo pélvico y las estructuras adyacentes.
• Terapia manual miofascial: Técnicas que buscan liberar la fascia (tejido conectivo) y reducir la tensión en la zona pélvica.
• Terapia manual visceral: Técnicas manuales para liberar adherencias o tensiones en los órganos pélvicos (vejiga, útero, intestinos) que puedan estar contribuyendo al dolor.
• Terapia miofascial Instrumental: Aplicación o uso de raspadores, dilatadores, masajeadores íntimos para estirar, relajar y soltar los músculos tensos del suelo pélvico.

2. Ejercicios Fisioterapéuticos del suelo pélvico

• Ejercicios de fortalecimiento del suelo pélvico «Kegel»: Fortalecen los músculos del suelo pélvico, mejorando la fuerza, resistencia, el control y la función.
• Ejercicio de Relajación del Suelo Pélvico o Kegel Inverso: Ayudan a relajar y a reducir la hiperactividad/hipertonía (tensión excesiva) de los músculos del suelo pélvico.
• Biofeedback: Dispositivos para monitorizar la actividad muscular y enseñar al paciente a tener conciencia de su movimiento perineal y así contraer y relajar correctamente los músculos del suelo pélvico.
• Entrenamiento con bolas de suelo pélvico: El uso de bolas específicas para el suelo pélvico puede ayudar a fortalecer y mejorar la percepción y control de los músculos.

3. Agentes Electrofísicos:

• Electroestimulación: Se aplican corrientes eléctricas como RUSA o FES para fortalecer los músculos del suelo.
• Electroanalgesia: Se aplican corrientes como: Interferencial o TENS para aliviar el dolor crónico, mediante la analgesia de las fibras nerviosas.
• Radiofrecuencia / Tecarterapia / Diatermia: Se estimula la neocolagenosis muscular y miofascial por medio del calor ayudando a reducir la inflamación y el dolor en la zona pélvica, mejorando la circulación y promoviendo la regeneración de tejidos.
• Ondas de Choque (Radial): Su efecto fisiológico mecánico de impacto en el tejido ayudan a liberar puntos gatillos y a estimular la circulación de la zona.

4. Fisioterapia Invasiva

• Punción seca: Se utiliza para liberar puntos gatillo en los músculos del suelo pélvico o en áreas relacionadas.
• Electropunción: Además de ayudar en la liberación del punto gatillo miofascial ayuda a neuromodular la percepción de la zona reduciendo el dolor y mejorando la función muscular.

5. Reeducación postural y del movimiento

• Ejercicios de corrección postural: Mejoran la alineación del cuerpo y reducen la carga sobre la pelvis.
• Técnicas de respiración diafragmática: Ayudan a relajar el suelo pélvico y mejorar su función.
• Movilidad articular: Para mejorar la movilidad de las articulaciones pélvicas, equilibrar tensiones musculares y/o miofasciales además de reducir el dolor.

6. Técnicas de terapia conductual y psicológica

• Terapia cognitivo-conductual (TCC): Ayuda a manejar el impacto emocional del dolor crónico.
• Técnicas de relajación y mindfulness: Reducen el estrés y la tensión muscular.

7. Educación del paciente

• Es fundamental que el paciente comprenda su condición y aprenda a manejar los factores que pueden agravar el dolor, como malas posturas, estrés o hábitos inadecuados.
• Implementación de nuevos hábitos en sus actividades de la vida diaria incluyendo actividades y/o instrumentos terapéuticos que le ayuden a mantenerse en equilibrio muscular y así evitar recaídas.

¿Cuándo se recomienda?

Estas técnicas son especialmente útiles en casos de:

• Prostatitis.
• Dolor de pene y testes no localizado.
• Goteo post miccional.
• Dolor pélvico crónico.
• Hiperactividad (Hipertonía) o Hipoactividad (hipotonía) del suelo pélvico.
• Disfunciones sexuales relacionadas con el suelo pélvico.
• Alteraciones miccionales relacionados con el suelo pélvico.
• Incontinencia urinaria o fecal.
• Prolapsos de órganos pélvicos.

Es importante que el tratamiento sea individualizado y guiado por un fisioterapeuta especializado en suelo pélvico, ya que cada caso requiere un enfoque específico. Además, en algunos casos, puede ser necesario combinar estas técnicas con otros tratamientos médicos o psicológicos.

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Urología Peruana Dr. Luis Susaníbar